____________________________Editorial
Desde aquí alabamos todos los esfuerzos que se están haciendo desde la Oficina Segovia 2016 y desde todas las demás instituciones ilusionadas con el proyecto. El reciente varapalo de Madrid 2016, no sabemos si perjudicará o beneficiará la candidatura segoviana, pero sí ha provocado un ligero "impasse" en el enfebrecido trabajo de captación de intenciones que desnivele cualquier balanza hacia nuestra ciudad. Lo que aquí queremos constatar es lo desagradable de tener que competir en esta ocasión, no con países lejanos, sino con ciudades cercanas a las que a quien más o quien menos les unen diferentes afectividades. Así, hemos recibido invitaciones de amigos, de toda la vida, para votar por sus ciudades cercanas y observamos al alcalde de Valladolid dejarse llevar por vete a saber qué afinidades en favor de Santander. Es como si desde fuera, alguien con "mala leche" estuviera provocando debates internos, combates dialécticos entre provincias hermanas, para luego dejar recaer la asignación sobre sabe qué ciudad y por qué motivos específicos. ¿Verdaderamente van a servir para algo las votaciones de las "webs"? En ese caso las mayorías no nos asistirían. ¿Va a valer de verdad el tener buenas instalaciones?. No creemos, porque en ese caso no habría habido debate fraticida entre Junta y Ayuntamiento sobre el Auditorio (donde todo pueda inaugurarse y clausurarse) y estaría ya construído ( o a medias) Entonces, ¿va a servir algo de algo, o esto de la designación va a depender del número de velas que se coloquen al santo de la zona? En este último supuesto, más nos vale estar atentos al próximo San Frutos y cantarle de verdad el Villancico, a pulmón abierto.
Fuera de bromas, admiramos y valoramos el gran esfuerzo por intentar que nuestra ciudad sea por un tiempo el referente cultural de europa. ¡Ánimo y suerte!
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